Volver al blog

Hay diseñadores que entienden el mobiliario como una suerte de escultura funcional; otros lo conciben a partir de elementos de arquitectura doméstica en los que predomina la estética. El diseñador maltés, Gordon Guillaumier, logra ambas cosas, firmando piezas que trascienden forma y función, a partir de una materialidad etérea que dialoga con el paisaje desde un profundo respeto al entorno. En ese transcurso profesional, Guillaumier se ha topado con diversos aliados, como puede ser RODA.

Nacida en Italia en la década de los 90, desde sus inicios la firma ha cultivado una sensibilidad única por el diseño exterior, elevando el mobiliario outdoor al terreno de la arquitectura y el interiorismo. Bajo su filosofía de «sustainable thinking», RODA ha integrado criterios medioambientales reales en cada fase de desarrollo: desde una selección de materias primas —como la teca FSC o el aluminio reciclable— hasta procesos de fabricación, embalaje y logística. En su caso, no se trata de una estrategia de comunicación, sino de una ética que estructura toda su práctica.

En ese contexto, la figura de Gordon Guillaumier encaja con precisión. Su enfoque conceptual, sereno y profundamente funcional ha nutrido una serie de piezas clave para la marca, entre las que destacan la colección Aspic, el sofá Arena, las sillas Orson o la mesa extensible Brick. Todas ellas comparten una estética sobria, un lenguaje moderno y un uso inteligente de materiales nobles y duraderos.

Aspic: el hormigón como lenguaje

Entre todas las piezas diseñadas por Guillaumier para RODA, la colección Aspic merece una mención aparte. Estas mesas escultóricas, disponibles en distintos tamaños y alturas, se caracterizan por sus formas puras y contundentes, realizadas en cemento. En ellas, el diseñador utiliza el cemento no como un recurso brutalista, sino como un material con matices, textura y calidez.


Las mesas Aspic funcionan tanto en espacios exteriores como interiores, y encarnan una síntesis perfecta entre masa y ligereza visual. La superficie circular parece flotar sobre una base cónica que se estrecha ligeramente hacia el suelo, generando una silueta equilibrada y atemporal. El cemento, además, no es una elección gratuita: es un material duradero, reciclable y con un impacto medioambiental reducido cuando se gestiona de forma responsable, como ocurre en el caso de RODA.

Funcionalidad, belleza y respeto

Otra de las piezas destacadas de Guillaumier es el sofá Arena, una tumbona elegante que combina estructura metálica con cuerdas técnicas tejidas a mano. Es un objeto de líneas limpias, cómodo y resistente a la intemperie, que encaja tanto en terrazas privadas como en proyectos contract de alta gama. El mismo equilibrio entre diseño y tecnología se aprecia en la silla Orson, donde la teca se modela con gran precisión para ofrecer una ergonomía impecable, o en la mesa Brick, extensible y sólida, pensada para adaptarse a múltiples contextos sin perder sofisticación.

La colaboración entre Gordon Guillaumier y RODA ejemplifica cómo el diseño contemporáneo puede operar desde una conciencia ética sin renunciar a la belleza. En un momento en que el diseño se enfrenta a una necesaria transformación hacia modelos más sostenibles, RODA y Guillaumier proponen un camino posible: muebles duraderos, fabricados con responsabilidad, pensados para habitar espacios y para la representación física de unas ideas.

Autor: Yolanda

Enlaces Rápidos

  • Add items on the 'enlaces-rapidos' location
Ver todos los resultados